«Tomé la decisión menos peor». Así describió Karim Adarvez el cambio a una categoría más dura en la semana previa a competir en la gira sudamericana, primero en Lima, Perú (17 y 18 de septiembre) y después en Bogotá, Colombia (24 y 25).
El judoca sanjuanino padece una lumbalgia (dolor localizado en la parte inferior o baja de la espalda) que le impidió entrenar con normalidad como lo venía haciendo y, luego de consultarlo con su entrenador personal y también con el seleccionador nacional, decidió pasar de la categoría de menos de 66 kilos a la que tiene a los 73 kilos como límite. «Al no poder entrenar con la exigencia habitual, no puedo hacer el corte de peso y tengo que subir un escalón», explicó.
En ese sentido, detalló que «no es mi categoría, es más pesada y los competidores son más fuertes», pero recordó que «en la Liga Nacional de España gané siete de los ocho combates en -73 y quedamos terceros como equipo. También tengo torneos ganados en Argentina (Binacional en Concordia, Metropolitanos, entre otros), pero para clasificar a los Juegos Panamericanos (Santiago 2023) es más dificultosa».
A pesar del cambio, el judoca igual dirá presente en Lima y Bogotá, pero debutará en el circuito panamericano en un peso superior. «Voy a dejar todo para sumar puntos para Santiago», dijo el sanjuanino en un tono optimista antes de emprender el viaje a tierras incas.